No importa que hayamos tocado miles de veces Sultans of Swing a lo largo de nuestras vidas, tampoco importa si ese día alguno está especialmente cansado, o incluso enfermo… porque la energía que desprende este tema ¡lo cura todo!, y nosotros lo seguimos disfrutando con la misma emoción e intensidad con la que lo interpretamos por primera vez.
Ya lo dijo Eric Clapton: «Toca cada noche como si fuera la última vez que vayas a hacerlo en tu vida»… y así debe ser. 




